Durante los días 1 al 4 de mayo se ha celebrado en Granada
el XXI Congreso Estatal de Astronomía (CEA), organizado en esta edición por la
Red Andaluza de Astronomía (RAdA).
El multitudinario evento reunió a
300 astrónomos aficionados y profesionales procedentes de toda la geografía
española, siendo acogidos en el marco incomparable del Parque de las Ciencias
de Granada. La organización de un encuentro de este tipo, de cuatro días de
duración, es algo harto complicado. Sin embargo, la opinión generalizada de
todos los que allí estuvimos, es que el Comité Organizador pasó el examen con
la calificación de sobresaliente. Verdaderamente, se han cuidado al máximo
todos los detalles, tanto los relativos a la relación personal con los
congresistas (nos han cuidado de maravilla) como al aspecto logístico y de
infraestructura en el desarrollo de las actividades del programa. Si a esto
añadimos el altísimo nivel de los trabajos presentados (ponencias, talleres,
posters) y las conferencias de los astrónomos profesionales mostrando los
resultados de las más recientes investigaciones, el resultado no puede ser más
satisfactorio. Por ello, antes de continuar, quiero felicitar de todo corazón a
todo el equipo de compañeros que se ha volcado literalmente para que nos
sintiéramos como en casa. Sin duda, el altísimo nivel de este CEA será difícil
de superar. Por si fuera poco, pasados ya más de veinte días desde la clausura, el
equipo sigue trabajando en lo que ha dado en llamar el postcongreso. Poco a
poco están subiendo todos los vídeos íntegros de las conferencias y de las
ponencias -magníficamente editados-, material multimedia que conformará un
verdadero legado de referencia para los futuros congresos. En este canal de YouTube están disponibles los documentos que se han ido subiendo.
Así las cosas, y para no hacer
excesivamente extensa la exposición, qué mejor relato para esta crónica que las
propias imágenes originales. Como un primer ejemplo no dejéis de visionar este
espléndido resumen del congreso.
Como puede apreciarse, muchas e interesantes
(y a veces curiosas) han sido las actividades que allí se desarrollaron. Por lo
poco habituales, fueron muy celebrados los monólogos científicos a cargo de
Miguel Abril e Irene Olga Puerto, dos de los integrantes del grupo The Big Van Theory y la grabación del programa de radio El Radioscopio a cargo de Emilio José
García (IAA-CSIC) y Susana Escudero (Canal Sur).
La simpática astrofísica y monologuista
científica Irene Olga Puerto. En su actuación nos explicó de la manera más divertida
que estamos hechos de polvo de estrellas.
Me resultó muy interesante la
conferencia del astrofísico argentino René Duffard, Investigador Ramón y Cajal
en el IAA (CSIC) que versó sobre El descubrimientode un sistema de anillos alrededor del asteroide (10199) Cariclo. Es de resaltar
la importancia del hallazgo ya que es la primera vez que se descubre una
estructura de anillo alrededor de un cuerpo menor. Como añadidura, éste es un
trabajo Pro-Am en el que han participado bastantes observadores no
profesionales, entre otros, mi colega argentino Carlos Colazo (Observatorio El gato Gris), gran astrometrista de este tipo de objetos (y también de estrellas
dobles). Mi aplauso y enhorabuena, compañero. Aquí tenemos a Colazo hablando del descubrimiento.
Nuestra contribución al XXI CEA,
consistió en una ponencia para presentar el Nuevo Catálogo Comellas de Estrellas Dobles Visuales. Aunque fui yo el portavoz
de esta intervención, me acompañaron en el estrado mis compañeros y coautores Rafael Benavides Palencia y Juan Luis González Carballo. El cuarto miembro del equipo,
Francisco Rica Romero, no presente en el congreso, fue debidamente mencionado en
la presentación. El acto resultó
tremendamente emocionante debido a la presencia en primera fila del profesor
Comellas, acompañado de su esposa y amigos. Esta carga emocional se dejó notar
a veces en ciertos requiebros en mi voz mientras hablaba y estoy seguro que mis
compañeros fueron presa también de algún que otro nudo en la garganta. Más allá
del trabajo presentado y de su repercusión, nos quedamos con la conexión que se
estableció entre los asistentes aquel sábado por la mañana del 3 de mayo. La
felicidad de José Luis Comellas y sus palabras de agradecimiento en la celebración
del XXV aniversario de la publicación de su catálogo, quedará en nosotros como el
más preciado recuerdo.
Portada de la ponencia.
Primeros compases de nuestra exposición.
Crédito imagen: Máximo Bustamante.
Tras
la conferencia fuimos requeridos para posar en los jardines junto a José Luis y
María Jesús.
Me gustaría comentar que el
primer día del congreso, en un acto privado, los doblistas hicimos entrega a D. José Luis de un pequeño
obsequio. El profesor Comellas, con esa mente despierta que le caracteriza
acertó a la primera de qué se trababa: una estrella doble. En efecto, le
entregamos una simbólica pareja en sobre relieve asomando en el campo ocular, una pieza única y exclusiva fundida en bronce,
encargada para la ocasión al escultor -afincado en Valladolid- José María Herrero.
El profesor Comellas mostrando
nuestro presente.
El mismo día por la tarde la
organización rindió un homenaje oficial
a José Luis Comellas. Sin duda fue éste un día intenso de emociones y
sensaciones para nuestro querido maestro. El vídeo del acto es una delicia.
Un profesor Comellas exultante de
felicidad dirigiéndose a la audiencia en el acto del homenaje oficial que se le
rindió.
Para no alargarme demasiado
mostraré algunas imágenes de estos días pasados en Granada, una ciudad engalanada
por el Día de la Cruz y rebosante de gentes alegres. No será fácil la selección
de instantáneas porque han sido momentos llenos de matices.
La más pura tradición granaína. Crédito imagen: María Arranz.
Detrás de mí, en el hall
principal del Parque de las Ciencias, un monstruo reflector portátil de 60 cm
expuesto para la ocasión.
Junto a Rafael Benavides en el
acto de inauguración del congreso.
El precioso restaurante La
Chumbera, en el Sacromente, donde nos ofrecieron el coctel de bienvenida. Fue
el momento clave para volver a conversar con tantos y tantos colegas que no vemos
de manera habitual.
Majestuosa estampa de la Alhambra
desde el Albaicín. Era mi primera vez y el impacto emocional fue tremendo. Crédito
imagen: Rafael Benavides.
Tentempié ofrecido cada día por la
organización a mitad de mañana. Hay que reponer fuerzas. Mis colegas Juan Luis
González (a la izquierda) junto a Rafa Benavides.
Acto reivindicativo a favor de
que no se cierre el Observatorio de Calar Alto.
Posando con dos de mis jóvenes compañeros
de Syrma. Era su primer congreso.
Un servicio especial de autobuses
urbanos contratado por la organización nos llevó hasta La Alhambra. Sería una
visita especial exclusiva para los congresistas en horario de tarde-noche.
Crédito Imagen: María Arranz.
El grupo del CEA a las puertas de
La Alhambra.
Una visita de lujo, sin duda. La Alhambra,
sin visitantes, solo podemos verla en los folletos publicitarios.
¿No lo he dicho? Increíble vista
del Patio de los Leones recientemente restaurado y totalmente desierto. Sublime.
Crédito imagen: Rafael Benavides.
Magía y embrujo desde los balcones de la La Alhambra. Crédito imagen: Rafael Benavides.
Junto a mis nuevos amigos
orensanos Elena Theotonio y Francisco “Paco” Fernández. Nos conocimos en el
tren camino de Granada y enseguida salieron a la luz un montón de afinidades.
El grupo va llegando al punto de
reunión interior.
Patio interior del Palacio de Carlos
V. Crédito imagen: Rafael Benavides.
La Luna asomando en el atardecer
mágico que vivimos en La Alhambra.
Esta imagen, tomada unas cuantas
horas después, mejor no comentarla. ¿Verdad compañeros?
Una importante primicia: El
astrofísico Emilio Alfaro anunció una segunda edición del congreso Pro-Am que
se celebrará el próximo año en Alcalá la Real, Jaén. Recordemos que el primero fue en Córdoba en 2009.
Importante: Mesa redonda-debate sobre la conveniencia de la fundación de una federación de asociaciones astronómicas de carácter nacional. Se ha dado el primer paso.
Primer premio de fotografía gran
campo: Encuentro de caminos,
realizada por mi colega Fernando Cabrerizo durante un viaje a Finlandia dedicado a
la caza de auroras. ¡Enhorabuena!
Ante la ausencia de Cabrerizo por
motivos laborales en el Centro Astronómico de Tiedra, me tocó hacer los honores
y recoger el premio en su nombre: un viaje a Calar Alto y un magnífico libro de
astrofotografía cortesía de Oryx. Podéis ver la entrega de premios completa aquí.
Sábado noche. Momentos previos
antes de salir hacia el restaurante donde se celebró la Cena de Gala del XXI
CEA. Tres autocares esperaban. De izquierda a derecha: José Luis Salto, Ramón
Naves, Rafael Benavides, Edgar Masa, Juan Luis González y Paco Fernández.
La que bien podría ser nuestra foto
oficial del CEA 2014. Tomada durante el cóctel previo a la Cena de Gala en los jardines del precioso restaurante La Mamunia.
Nuestra mesa en la Cena de Gala.
A la derecha Josep Mallol, presidente de la Sociedad Astronómica de Lleida. Un
placer haber compartido contigo estos buenos momentos.
Precioso salón comedor del restaurante La Mamunia al más puro estilo arabesco.
El broche final de la cena:
Blanca Troughton, presidenta de la RAdA, presentando la actuación de folclore andalusí
que amenizó la velada. El intérprete cantó un repertorio de canciones que hablaban del cielo y de las estrellas. Todo un detalle.
Aunque muchas otras imágenes y
otros tantos comentarios, sin duda alguna, serían merecedores de seguir llenado
este espacio, voy a parar aquí. Que sea este el resumen de un CEA inolvidable en
la ciudad de Granada. Una última imagen, como es de rigor, ha de ser y no otra, la foto de familia de los 300 congresistas que allí acudimos. Esa es la
palabra, “familia”; así nos hemos sentido porque eso es lo que somos.
Curioso, hasta en esto, la
organización del XXI CEA ha sido original: la foto grupal se tomó desde el aire
con un Drone. No os perdáis el “cómo se hizo” aquí.
Una de las cuatro imágenes
oficiales del grupo publicadas por la organización.
Pamplona acogerá el CEA XXII, los
compañeros de Astronavarra ya están trabajando en ello. Allí estaremos dentro de dos años. Lo que en Granada aconteció ya está
grabado en nuestro recuerdo. Que sirvan unos versos exquisitos de mi amiga
María Arranz como cierre de esta crónica. Reflejan maravillosamente lo que
sentí al pie de Sierra Nevada. Ad Astra.
En el barrio del Albaicín,
el mirador de San Nicolás
viendo el anochecer con la reina de Granada,
La Alhambra, su sultana
y de peineta Sierra Nevada.
Más bonito nada.
Y nosotros en el crepúsculo de visita privada,
íntima y silenciosa.
Nosotros y nadie más.
Rodeados de amigos y el silencio, y el agua.
El agua que juega tímidamente
y que corretea por sus caminos
tantas veces recorridos,
sus caminos tan llenos de leyendas.
Y el Patio de los Leones renovado, majestuoso y blanco.
Y los pájaros que nos cantan, o le cantan a ella,
a La Alhambra, que se sabe admirada por tanta belleza
y posa orgullosa y altanera, mirando a Granada.
Granada, la ciudad más bonita, ahora engalanada.
Hermoseada de cruces, cruces de flores y tradiciones.
Ilusiones realizadas por éstas gentes tan amables, tan
alegres.
Mantones en las ventanas, flores en el pelo
y volantes por las calles,
y volantes por las calles,
y esas mujeres tan guapas y esos hombres tan galanos.
¡Que está muy guapa Granada!
está bonita y lo sabe y por eso lo celebra
y yo he tenido la suerte de compartirlo con ella.
Actualización (27/05/2014): Desde hoy está disponible en PDF el Libro de Actas del XXI CEA. Casi 300 páginas de excelentes artículos. No os lo perdáis.