TALLER VIRTUAL INTERNACIONAL DE ESTRELLAS DOBLES

En ocasiones un único minuto resulta hacerse eterno; en otras, como ocurrió el domingo 13 de junio, seis horas pueden pasar en un soplo. Estaba previsto que la duración del Taller Virtual Internacional de Estrellas Dobles se alargara por un espacio aproximado de dos horas. Sin embargo, el acto se prolongó durante seis horas ininterrumpidas. Y cuando digo ininterrumpidas lo hago en el sentido más literal de la palabra. No me consta que se haya hecho algo parecido hasta ahora y por ser una idea pionera, innovadora y tremendamente formativa, debo felicitar efusivamente a su promotor, Roberto Vasconi, y al coordinador técnico del proyecto, Alejandro Garro. Indudablemente, los medios técnicos modernos son poderosos y facilitan la comunicación entre las personas de manera rápida, eficaz e instantánea. No obstante, tengo el convencimiento de que la actitud y la predisposición de los interlocutores son las verdaderas claves del éxito. Y es que lo importante no es hacer lo que uno quiere, sino querer lo que uno hace. El interés por un fin común es el motor de todo y permite salvar eficazmente los eventuales escollos del camino.

Sería justo -y necesario- valorar aquí la comprensión y la paciencia de nuestras esposas e hijos, quienes sacrificaron gustosamente la mañana/tarde del domingo para que unos locos por las estrellas dobles pudieran celebrar una extraña reunión bautizada como Taller Virtual. Con seguridad todos mis compañeros compartirán conmigo este sentir y me erijo portavoz para rendir homenaje a nuestras respectivas familias.

Al principio de la conexión se sucedieron varios problemas técnicos relativos con el audio. Algunas veces los duendes informáticos juegan estas malas pasadas. En ciertos instantes, se palpaba la tensión en el ambiente ante una eventual probabilidad de que la mala suerte diera al traste con el proyecto. Finalmente, la maestría de Alejandro Garro en la dirección técnica, permitió que la conexión se estabilizara, ya sin problemas, hasta el final. Entre tanto, los participantes se fueron incorporando a la "ruedita" y finalmente pudimos dar comienzo a la sesión. Tengo que decir que el nivel de participación fue considerablemente alto, máxime teniendo en cuenta el carácter tan específico del tema a tratar. Este hecho demuestra el gran interés que se ha suscitado por las estrellas dobles entre este grupo de veteranos astrónomos argentinos. Efectivamente, todos ellos acumulan una larga experiencia como observadores en otras disciplinas astronómicas y dominan a la perfección tanto sus instrumentos ópticos como las CCD. Con esto ya tienen mucho camino recorrido, pues al no ser astrónomos noveles en sentido estricto, tan solo tendrán que profundizar en la metodología específica requerida para el estudio de las estrellas dobles.

El impulsor y principal culpable de que entre los miembros de la RAA se haya dado este acercamiento masivo hacia los sistemas estelares ha sido Roberto Vasconi, quien ha sabido inocular a sus colegas el potente veneno de este área observacional. Finalmente, esta revolución vasconiana, si se me permite la acuñación del término, ha culminado en la organización de este TVED. El listado de participantes en esta convocatoria resultó de esta manera:

Edgardo Masa Martín (Valladolid, España)
Florent Losse (Bordeaux, France)
Alejandro Tombolini (Buenos Aires)
Andres Chapman (Buenos Aires)
Juan Carlos Chapman (Buenos Aires)
Carlos Krawckenko (Buenos Aires)
Gastón Ferreirós (Buenos Aires)
Carlos Colazo (Tanti, Córdoba)
Juan José Guagliardi (Buenos Aires)
Nicolás Vasconi (Córdoba)
Jorge Van Zandweghe (Cabana, Córdoba)
Roberto Vasconi (Villa Allende, Córdoba)
Sergio Morero (Villa Allende, Córdoba)
Alejandro Garro (Nueva Córdoba)

Tuve la agradable oportunidad de saludar también a Carlos A. Krawckenko, uno de los más destacados doblistas argentinos, que fue invitado como representante de la LIADA. Mi contacto con Krawckenko se alarga ya por varios años, al compartir con él y con Rafael Benavides el cargo de Coordinador Adjunto de la Sección de Estrellas Dobles de la LIADA, bajo la supervisión del Coordinador General, Francisco Rica.

 

Comentaré ahora el desarrollo del taller en sí que, como ya anuncié en la entrada anterior de duae stellae, tuve el placer de compartir con Florent Losse, quien intervino desde Francia. Para hacer más gráfica la exposición utilizamos dos presentaciones en PowerPoint que pudieron ser seguidas en directo por todos los participantes.

En una especie de telepatía, las portadas de nuestras presentaciones fueron muy similares.

Por mi parte, y abriendo el taller, mi intervención se centró en sentar la bases y los fundamentos de la astrometría relativa CCD de estrellas dobles visuales, explicando los dos métodos que pueden utilizarse; a la sazón, la reducción astrométrica clásica mediante el cálculo de las coordenadas absolutas (AR y DEC) por comparación con estrellas de referencia extraídas de un catálogo astrométrico (por ejemplo mediante el software Astrometríca) y la reducción astrométrica basada en el cálculo de las coordenadas de placa (x,y) para su posterior transformación en Theta y Rho (software Reduc). También, en la introducción hice un breve recorrido por la historia de las estrellas dobles, comenté los conceptos de opticidad y binariedad, los parámetros que hay que medir y por qué es de vital importancia su estudio: el cálculo de las masas estelares. Finalicé enumerando algunos de los trabajos que un astrónomo amateur puede abordar, todos enmarcados en una colaboración Pro-Am de primer nivel.

Un ejemplo de dos de mis diapositivas.

Florent continuó con una magnífica presentación muy visual donde acometió gran cantidad de ricos matices, centrándose especialmente en la instrumentación necesaria para trabajar (telescopios, cámaras), distancias focales óptimas, la calibración del equipo, la valoración de la turbulencia atmosférica y un apartado con pautas para mejorar la calidad de las medidas. Me gustó mucho una de sus diapositivas en la que enumeraba las cualidades de las que debe hacer gala un astrónomo:

• paciencia: esperar las buenas condiciones, preparación de la observación, reducciones.

• modestia: no se trata de establecer records.

• honestidad: en la reducción, espíritu crítico.

Me permitiré añadir una cualidad más de mi cosecha: Altruismo. La generosidad al compartir conocimientos, métodos y herramientas con nuestros afines es algo impagable. Y en este sentido el propio Florent Losse es uno de los más contundentes ejemplos: distribuye su excelente programa de reducción (Reduc) sin costo alguno por todo el mundo. Una actitud como la suya es digna de reconocimiento y no quería dejar de valorarla en su justa medida. Gracias, Florent.

Seguidamente, Florent prosiguió con la parte práctica del taller, en la que realizó una demostración "en vivo" midiendo estrellas dobles con Reduc. Todo un lujo contar con el propio autor del programa para desvelar todos sus entresijos y peculiaridades.

Yo ya estaba al corriente de que Florent estaba trabajando en la programación de una nueva versión de su software (e incluso he podido "jugar" con ella) capaz de medir con la técnica de interferometría speckle. Y qué mejor oportunidad para darla a conocer que durante la celebración de este taller. Realizó varias demostraciones que nos dejaron, cuando menos, asombrados. Es impresionante la potencia y sencillez de manejo del nuevo Reduc al trabajar con interferometría de manchas. Estoy convencido de que a corto plazo esta técnica, hoy por hoy prácticamente relegada al sector profesional, será la forma común en que trabajaremos los amateurs. Su espectro de aplicación nos permitirá medir pares muy cerrados, llegando a rozar el límite de resolución de nuestros telescopios.

Las capacidades del nuevo Reduc interferométrico.
 (Cortesía Florent Losse).

Al fondo de la imagen Florent Losse tecleando en el ordenador que contiene las ¡¡12000 líneas de código!! de la nueva versión de Reduc. (Cortesía de Florent Losse)

Durante toda su intervención Florent habló en francés. Mi otro cometido durante el desarrollo del taller era precisamente la de traducir "al vuelo" sus palabras para trasmitirlas en castellano al resto de los participantes. Y esta era una de mis principales inquietudes: si sería capaz de mantener una traducción simultánea fluida y dinámica que diera agilidad a la exposición. Son ya muchos años sin hablar ni escuchar francés y lógicamente se da un gran pérdida de reflejos. De ahí el cierto temor por mi parte a no estar a la altura y deslucir el resultado. Sin embargo, en cuanto escuché la voz de Florent me llené de excelentes sensaciones y, finalmente, no sin una gran dosis de concentración, pude completar con éxito la misión encomendada. Modestia aparte puedo decir que el resultado fue, a mi modo de ver, excelente y creo que la opinión de los participantes es coincidente con mi juicio.

 En plena tarea de traducción en vivo.

Se cumplía la sexta hora de conexión cuando llegó el momento de las despedidas y dimos por concluido el evento. Los coordinadores pronunciaron unas emotivas palabras de agradecimiento hacia nosotros y era tal el grado de euforia reinante que hasta el propio Florent se arrancó espontáneamente con un acento muy gracioso diciendo: "¡Un fuerte abrazo para todos!".

Si se dan cuenta, hemos vuelto al principio: un grupo de personas unidas por un interés común compartiendo inquietudes y afinidades, en un marco de amistad donde la distancia queda relegada a un plano secundario e irrelevante. Parafraseando al maestro Comellas es cierto que la "astronomía hace buena gente". Y la buena gente hace buena Astronomía, diría yo.


Eran las 21:30 horas en España y fue justo al desprenderme de los auriculares y el micro cuando sentí que mi espalda estaba dolorida, el cuello tenso y el estómago daba su voz de alarma recordándome que no había comido nada desde el desayuno. No deja de ser curioso que cuando uno está concentrado en algo placentero las sensaciones físicas permanecen aletargadas y no se manifiestan. Tengo que reconocer que fue un encuentro memorable de los que quedarán siempre en el recuerdo. En mi nombre y en el de Florent Losse, nuestro agradecimiento por haber pensado en nosotros para la celebración de este encuentro. Ha sido un auténtico placer, compañeros. Hasta aquí.

Post scríptum
Los miembros de la RAA no han perdido el tiempo. Alejandro Garro ya ha confeccionado un listado con más de 200 estrellas dobles del sur que "necesitan urgentes mediciones" y celebrarán semanalmente, los jueves, un taller local de medición. ¡Bravo!. Mantenedme al corriente de vuestros progresos.